Medinaceli

Hace 15 años visité por primera vez Medinaceli, de esa excursión surgió mi primer diario de viajes, donde contaba mis viajes, la forma de vivirlos y de disfrutarlos, entonces se llevaba el papel, el cuaderno o libreta y el bolígrafo. En Marzo de 2009 este diario se convirtió en un blog, A Salto De Mata. Medinaceli me apasiona y he querido que este sea mi primer viaje de 2011.

Medinaceli fue la celtibérica Ocilis, aunque fueron los romanos, tras su conquista, quienes ocuparon el cerro actual.

Accesibilidad:

Situada en un cerro a 1200 metros de altitud, se accede puede acceder con coche, existiendo amplias zonas de aparcamiento. El suelo de toda la población es de piedra plana, por lo que las sillas de ruedas deambularán perfectamente por una ciudad completamente llana.

Recorrido:

A la entrada del pueblo, se encuentra el centro de recepción de visitantes donde os darán toda la información que necesitéis, por supuesto, el acceso se encuentra adaptado para silla de ruedas.

La Plaza Mayor.

Típica plaza castellana porticada de forma rectangular en la que se encuentran importantes edificios monumentales como la antigua Alhóndig -obra del siglo XVII- con dos pisos de arcos y el Palacio Ducal del siglo XVI.

La Colegiata de Nuestra Señora de la Asunción de Medinaceli.

Enorme edificio del siglo XVI, donde se combinan la arquitectura tardogótica con la renacentista. Se erigió en el lugar de una iglesia románica dedicada a Santa María.

Estaba cerrado el acceso, y no la pudimos ver. Se trata de un templo abovedado con crucería compleja. Tiene una gran torre campanario. En el interior destaca la sillería del coro y las verjas que cierran elcoro y la capilla Mayor.

Arco árabe.

Una de las puertas de acceso a la ciudad. Nos cuentan que, aunque le llaman Arcó Árabe, el arco actual es posterior, de estilo gótico mudéjar.

Arco Romano.

Para terminar nuestro recorrido por la ciudad, y tras recorrer sus calles y espaciosas plazas, llegamos al mirador de los barrancos disfrutando de la panorámica y el paisaje, con un centinela de excepción: el Arco Romano del siglo II, de tres ojos y considerado por algunos como arco de triunfo, las últimas investigaciones siguen la hipótesis de que fuese una entrada monumental a la ciudad romana puesto que la muralla romana estaba unida a este arco.

Os recomiendo que disfrutéis de la panorámica, si el día está despejado disfrutaremos de barrancos, colinas, cerros, campos y rapaces surcando el cielo de una Medinaceli, monumental, elegante y sobria, muy cuidada gracias a que durante todo el año se encuentra habitada.

Cuidada su restauración, lo que más me ha gustado es su naturalidad y que no se trata de una «casita de muñecas» puesta ahí para el turismo.

Existen varios restaurantes donde disfrutar de la rica gastronomía de la zona.