¿Estuvo Hitler en Bariloche?

Será leyenda, será verdad, será mentira…. pero Hitler y Bariloche están unidos en la historia. No voy a descubrir nada nuevo pero si voy a compartir la experiencia que viví recorriendo Bariloche, rodeando el impresionante y bello Lago Nahuel Auapi.

Nuestro guía, que había sido un cargo importante de turismo nos iba contando de forma amena aspectos muy interesantes de este territorio que no adelantaré ya que lo veréis en el vídeo que publicaré en Viajeros sin límite, entre esos relatos estaba la posible fuga de Hitler a Argentina en submarino y su estancia en Bariloche. Mucha información era fruto de artículos, blogs, documentales en la tele que hablan o han hablado de ello; y otra, la más interesante, fruto del boca a boca de las gentes de Bariloche.

Mientras nos desviábamos de la carretera de «Los Siete Lagos» y nos adentrábamos por un camino que el monovolumen, a duras penas podía atravesar, nuestro guía nos contaba que íbamos a ver una estancia ( granja o establecimiento rural) ya abandonada donde dicen que estuvo Hitler ocultado, también nos dice que esta zona, como el resto de Bariloche fue muy castigada por las cenizas del volcán chileno Puyehue en junio de 2011.

Con ese cóctel de misterio e inquietud llegamos con el coche hasta una cerca que mostraba una atmósfera inquietante y misteriosa…. A mi mente llegaban gritos, pánico, terror… y sobretodo mucha, muchísima melancolía y tristeza…

¿Estuvo Hitler en Bariloche?

Lo que un día llegó a ser un gran complejo residencial, hoy yacía bajo cenizas y restos de una de las erupciones más dañinas que se han conocido, los tejados que un día posaban orgullosos al sol hoy aparecían genuflexos por el peso de la ira de una erupción que ascendió piedras y magma a 10.000 metros de altura.

Todo el entorno se encontraba con toneladas de cenizas hasta tal punto que el suelo parecía haber sido atacado por un tsunami que en su retirada había dejado la arena arrastrada de una playa que se encuentra a cientos de kilómetros. Los árboles que habían sobrevivido al brutal evento se encontraban con varias capas de cenizas que les daban un aspecto ajado y polvoriento.

Me dio la impresión que la naturaleza se había ensañado con aquel lugar que, según la rumorología popular, había albergado a un criminal y genocida como Hitler.

Curiosamente, la naturaleza en su expresión más violenta borró toda huella y recuerdo posible dejando un desolador, melancólico y, sin embargo bello entorno de quietud, tranquilidad y sosiego.

Me quedo con las vivencias, con estas historias que nos suceden cuando viajamos y nos dejamos llevar, cuando dejamos que todo fluya, cuando dejamos de ser turistas y pasamos a ser nativos.