Pamplona en unas horas


Inmerso en el parque del Arga, en la zona de Corralillos (llamada así por encontrarse allí los corrales para los toros de San Fermín) se encuentra una amplia zona de aparcamiento bien señalizada.

Desde allí, a poco metros y con rebajes de bordillos bien ejecutados llegaremos a la Cuesta de Santo Domingo donde se encuentra el Ascensor-cremallera que nos sube al casco histórico de Pamplona que nos deja en la Calle Descalzos. Dos ascensores amplísimos y donde cabremos perfectamente con silla o scooter y los botones cuentan con indicación Braille para personas con dificultades de visión.

El Casco Histórico pamplonica está dividido en tres burgos (antiguamente tres ciudades distintas) San Cernin, Navarrería y San Nicolás.

Hay una inscripción en el suelo de una de sus calles que localiza los tres burgos que conforman el casco viejo de la ciudad.

Desde el ascensor, en la Calle Descalzos tenemos unas vistas impresionantes del Monte San Cristóbal y una panorámica de los barrios de San Jorge, La Rochapea, Ezcaba y la Chantrea, y, más a lo lejos dos pueblos Artica y Ansoain.

Continuaremos por la calle Eslava, calle Mayor y San Saturnino donde encontraremos la Belena de San Cernín. Las Belenas son callejas interiores de manzanas, que en un principio funcionaban como viales de servicio interior y que garantizaban el acceso a talleres, almacenes o estancias secundarias de los edificios residenciales.

En la plaza del Ayuntamiento, se encuentra el bello edificio de la Casa Consistorial en la confluencia de los tres burgos ya que en 1423 el Privilegio de la Unión ordenaba el levantamiento del edificio y la unión de las tres demarcaciones. Su colorida fachada es de estilos barroco y neoclásico.

Para disfrutar de la gastronomía en miniatura  podemos visitar el Mesón de la Navarrería, con una entrada a pié de calle y una plataforma para subir a un nivel superior. Podemos destacar sus fritos y unos bocadillos para morirse de ricos, especialmente el “pa’l Futbol” con ingredientes tan ricos como la pechuga de pollo y jamón… y otros ingredientes que no os desvelamos.

Una zona preciosa del casco antiguo  y poco visitada por los turistas es la plazuela de San José y el Redin , con vistas panorámicas espectaculares de la baja Pamplona  y un restaurante, el Rincón del  Caballo Blanco, donde tomarse una cervecita o un refresco supone toda una experiencia de sensaciones.

Artículo | Miguel Nonay

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